Mira que el continente africano nos regala exquisitos aceites y deliciosas mantecas. Sustancias naturales que se han estado utilizando desde tiempos inmemoriales por las tribus locales. Esto demuestra definitivamente que tienen valiosas propiedades. El aceite de Argán es de mis preferidos.
En esta crema lo incluimos como aceite principal, y está presente en un elevado porcentaje, para que se note. Porque nos interesa su contenido en ácido oleico y linoleico, dos ácidos grasos esenciales para la formación de nuestras membranas celulares.
Es una emulsión espesa y a la vez de fácil absorción. De color marroncillo que me recuerda al chocolate porque contiene cacao en polvo. Te la presentamos en envase de vidrio de 50 ml, para que puedas aprovecharla a tope.
El increíble olor lo pone el aceite esencial de incienso . Penetrante y un tanto alimonado, me recuerda el olor de los templos y me invita a la meditación. Aprovecha.
Esta crema se utiliza como crema de día sobre la piel limpia. Se aplica con los dedos extendiendo siempre desde el centro del rostro hacia afuera, y no te olvides de aplicártela también en el cuello, siempre hacia abajo.
Copyright © 2019 ONZAS DE SABOR. Todos los derechos reservados.